Los arrebatos de comportamiento se manifiestan como:
- Agresión verbal (por ejemplo, berrinches, rabias, discusiones, peleas)
- Agresión física hacia la propiedad, animales u otros individuos
Algunos adultos con TEI se involucran en agresiones verbales o físicas que causan daños o destrucción de propiedad o lesiones físicas a animales u otras personas. Otros tienen episodios menos graves de agresión verbal y física que no causan lesiones ni destrucción.
La magnitud de la agresión expresada durante los arrebatos recurrentes es totalmente desproporcionada a la provocación o a cualquier factor de estrés psicosocial precipitante. Los arrebatos recurrentes no son premeditados, ni se comprometen a lograr un objetivo tangible como el dinero, el poder o la intimidación.
Los arrebatos violentos que caracterizan el trastorno explosivo intermitente generalmente están precedidos por un breve pródromo. El impulso suele ir precedido por un aumento de la sensación de tensión o excitación que progresa rápidamente. Algunos adultos experimentan irritabilidad, rabia, aumento de energía, pensamientos acelerados y habilidades de comunicación deficientes. También pueden experimentar síntomas somáticos como entumecimiento, temblor, palpitaciones y opresión en el pecho. Los arrebatos agresivos impulsivos tienen un inicio rápido y suelen durar menos de 30 minutos.