El trastorno por consumo de tabaco en adultos

El trastorno por consumo de tabaco se puede definir como un patrón problemático del consumo de tabaco que conduce a un deterioro o malestar clínicamente significativo, manifestado por al menosdosde los siguientes síntomas, que ocurren en un período de12-meses:

• El tabaco a menudo se consume en cantidades mayores o durante un período más largo del que se pretendía.
• Existe un deseo persistente o esfuerzos infructuosos para reducir o controlar el consumo de tabaco.
• Se gasta una gran cantidad de tiempo en las actividades necesarias para obtener o consumir tabaco.
• Un ansia, o un fuerte deseo o necesidad de consumir tabaco.
• Un consumo recurrente de tabaco que resulta en el incumplimiento de las principales obligaciones en el trabajo, la escuela o el hogar (por ejemplo, interfiere con el trabajo).
• Un consumo continuo de tabaco a pesar de tener problemas sociales o interpersonales persistentes o recurrentes causados o exacerbados por los efectos del tabaco (por ejemplo, discusiones con otras personas por consumir tabaco).
• Las actividades sociales, ocupacionales o recreativas importantes se abandonan o reducen debido al consumo de tabaco.
• Un consumo recurrente de tabaco en situaciones en las que es físicamente peligroso (por ejemplo, fumar en la cama).
• El consumo de tabaco continúa a pesar del conocimiento de tener un problema físico o psicológico persistente o recurrente que probablemente haya sido causado o exacerbado por el tabaco.
• Tolerancia, según se define por cualquiera de los siguientes síntomas:
• La necesidad de cantidades considerablemente mayores de tabaco para lograr el efecto deseado.
• Un efecto notablemente disminuido con un consumo continuo de la misma cantidad de tabaco.
• Abstinencia, según se manifiesta por cualquiera de los siguientes síntomas:
• El síndrome de abstinencia característico del tabaco:
• El consumo diario de tabaco durante al menos varias semanas.
• El cese abrupto del consumo de tabaco, o la reducción de la cantidad de tabaco consumido, seguido en las próximas 24 horas por cuatro horas (o más) de los siguientes síntomas:
• Irritabilidad, frustración o ira.
• Ansiedad.
• Dificultad para concentrarse.
• Aumento de apetito.
• Inquietud.
• Estado de ánimo deprimido.
• Insomnio.
• El tabaco (o una sustancia estrechamente relacionada, como la nicotina) se toma para aliviar o evadir los síntomas de abstinencia.

Más de 16 millones de estadounidenses viven con enfermedades relacionadas con el tabaquismo. En los últimos años, el consumo de tabaco ha disminuido: en el 2005, el 20,9% de los adultos estadounidenses fumaban.

Los productos de tabaco sin humo son una causa comprobada de cáncer y no son una alternativa segura a los cigarrillos. Los puros tienen muchos de los mismos riesgos para la salud que los cigarrillos, incluso causan ciertos tipos de cáncer. Actualmente no se sabe lo suficiente acerca de los cigarrillos electrónicos para determinar las consecuencias para la salud y la seguridad de estos productos.

Muchos factores influyen en que una persona pruebe el tabaco, como la presión social y familiar. La mayoría de los adultos que fuman cigarrillos comenzaron durante su adolescencia. Como la nicotina es altamente adictiva, muchas de las personas que empiezan a fumar terminan siendo adictas. Las personas que tienen otros trastornos psiquiátricos y relacionados con sustancias son particularmente susceptibles al trastorno por consumo de tabaco.

• Tratamientos breves

• Evaluación y tratamiento de un médico internista u otro proveedor

• Tratamientos conductuales/psicosociales

  El asesoramiento individual, grupal y telefónico es efectivo y su eficacia aumenta con la intensidad del tratamiento. Dos componentes del asesoramiento son especialmente eficaces:

  • El asesoramiento práctico (resolución de problemas/entrenamiento de habilidades)
  • El apoyo social y aliento recibido como parte del tratamiento

  El asesoramiento intensivo es especialmente eficaz. Existe una fuerte relación dosis-respuesta entre la intensidad del asesoramiento y el éxito para dejar de fumar. En general, cuanto más intensa es la intervención del tratamiento, mayor es la tasa de abstinencia. Los tratamientos pueden hacerse más intensos aumentando (a) la duración de las sesiones de tratamiento individuales y (b) el número de sesiones de tratamiento.

  
  

  Otras modalidades efectivas incluyen:

  • La terapia telefónica para dejar de fumar
  • Las técnicas motivacionales

  Las intervenciones farmacológicas

  Hay varios medicamentos efectivos para la dependencia del tabaco, excepto cuando esté contraindicado por razones de salud o con poblaciones de adultos específicas para las cuales no existe evidencia suficiente de eficacia (es decir, mujeres embarazadas, consumidores de tabaco sin humo, fumadores ligeros). Los medicamentos se pueden usar solos o en combinación. Se ha encontrado que la combinación de medicamentos y terapia es más efectiva que cualquiera de los dos individualmente.

  • Medicamentos de primera línea
    • Bupropion SR
    • Chicles de nicotina
    • Inhaladores de nicotina
    • Pastillas de nicotina
    • Aerosol nasal de nicotina
    • Parches de nicotina
    • Vareniclina
  
  
  • Medicamentos de segunda línea
    • Clonidina
    • Nortriptilina

  
  
  

  La evidencia preliminar sugiere que se podrían considerar las siguientes estrategias, pero no como un sustituto de los tratamientos con más validación mencionados anteriormente:

  • El refuerzo tangible a corto plazo (por ejemplo, recolectar dinero que normalmente se usaría para comprar tabaco o productos relacionados, y guardarlo para comprar una recompensa por dejar de fumar)
  • La hipnosis
  • La retroalimentación fisiológica
  • El ejercicio como complemento para aliviar el deseo por la nicotina