Las personas con tricotilomanía se arrancan el pelo de cualquier parte del cuerpo. Sin embargo, los sitios más comunes son el cuero cabelludo, las cejas y las pestañas. Por lo general, las personas con tricotilomanía manipulan el pelo que se arrancan de alguna manera, por ejemplo, haciéndolo rodar entre sus dedos, mordiéndolo y/o tragándoselo.
La pérdida de pelo puede ser muy notable; por ejemplo, la persona puede tener un parche de calvicie (a menudo en la corona o en los lados de la cabeza) o una pérdida de pelo completa en el cuero cabelludo, las pestañas o las cejas. Sin embargo, en otros casos, la extracción del pelo puede estar distribuida y la pérdida de pelo puede ser menos notable. La persona también puede disfrazar la pérdida de pelo con maquillaje, bufandas o pelucas.
Una persona con tricotilomanía puede arrancarse el pelo en respuesta a un impulso o una sensación de picazón que se alivia al arrancárselo. Otras veces, la persona se puede arrancar el pelo sin darse cuenta de lo que está haciendo. Las personas con tricotilomanía a veces informan que experimentan una sensación de alivio o de satisfacción después de arrancarse el pelo.
Para diagnosticar la tricotilomanía, el arrancarse el pelo o sus consecuencias deben ser angustiantes (molestas) o perjudiciales (convertirse en un obstáculo en la vida de la persona).